Desde bien pequeña imaginando y soñando con ese día mágico, el más importante de mi vida….pero siempre con una incógnita, quién sería el que estaría esperándome allí, en el altar? Fuera el que fuese, si algo tenía claro es que una condición indispensable era que viviese ese día, como mínimo, con la misma intensidad con la que lo iba a hacer yo.
Y un 24 de julio llegó él, que parecía estar en la sombra 10 años atrás y que de repente decidió aparecer e iluminar cada uno de mis días en este maravilloso mundo. Fue fácil, es más yo diría que fue algo inminente desde el primer segundo…la gente lo llamaba “principio”, nosotros decidimos no llamarlo y simplemente vivirlo.
Y después de 3 años llegó el día, ese que siempre había soñado y que recién levantada no era capaz de asimilar. Reinaba la calma aparentemente, hasta que esa emoción, esos 27 años deseando vivir ese momento me invadieron, y de qué forma…emoción, nervios y lágrimas que culminaron cuando al bajar de ese precioso coche de época, pude ver a todas y cada una de las personas que Carlos y yo habíamos decido que nos acompañaran en el día más importante de nuestras vidas; reinaba el silencio y allí esperándome, al final del camino, estaba él…sin poder contener las lágrimas nuestro coro rompió a cantar, había llegado el momento.
Cuando llegamos a Cartuja, no podía ser de otra forma: magia y elegancia reinaban en sus jardines de la mano de Robi y Belinda Duart, la boda que siempre habíamos soñado estaba ante nuestros ojos, y tan solo debíamos dejarnos llevar por el maravilloso equipo de profesionales que conforman La Cartuja de Ara Christi, liderado por el mejor en lo que hace, Japhet Meneses. Siguió la noche y pudimos disfrutar del más que acertado espectáculo diseñado por Alkilaudio a nuestra imagen y semejanza….una boda muy “nuestra”, hasta el mínimo detalle estaba cuidado y pensado, y sin lugar a duda lo tuvimos claro desde el principio, el mejor para plasmarlo y plasmarnos era él, Antonio Sanz.
El 19/09/15 mi marido y yo pudimos sentir que los sueños sí se cumplen.